Él y ella.

Él: Perdóname, por todo, te quiero y te quise demasiado demasiadas veces, demasiado tiempo el que estoy pasando contigo, te quiero mucho te lo repetiría mil veces más, pero es que ahora no lo ves, pero no podemos estar juntos. Mis amigos me llaman palurdo mil veces, y siento verdadera rabia a que me lo digan, esto no funciona mi amor...
Ella: ¿No funciona? No lo entiendo, sabes que eres mi vida... como puedes hacerme esto después de habernos conocido tanto los dos, eres mi mitad y yo la tuya, ¿recuerdas? ¿es que a caso no recuerdas nuestra fecha? nuestro día, nuestro todo, y esto porque es, por ellos, ¿por tus amigos? no lo entiendo, es muy inmaduro por tu parte, ¿no me querías tanto? estoy hecha un lio, no te entiendo, voy a morirme de verdad si no estás... te lo juro.Él: Este solo es un pequeño motivo por el que creo que esto no... no funciona, cielo.
Ella: No me vuelvas a llamar cielo nunca más. Y puedo saber, ¿¡qué motivos tienes!? ( Ya muy enfadada)Él: Es que... es muy difícil definirlo.
Ella: Defínelo ya, no sea que me entre algo. (Se izo una pausa) ¡Te estoy diciendo que me lo digas ya!Él: Mira es… es ella, tu mejor amiga. Cuando hemos estado juntos quiero decir, los tres, me atrajo físicamente, pero he descubierto que es... verdaderamente... genial, es... especial.
Ella: [...] Me estas mintiendo, ¡Dime que me estas mintiendo!
Él: Eso no arreglaría las cosas.Entonces ella sintió mucho mareo de golpe, sintió como se le clavaban muchas agujas pequeñas en todo el cuerpo, y tuvo que sentarse. Cogió aire e intento hablar, pero no podía, las palabras no le salían, no podía ahora.
Ella: Estas diciendo qué... te has... e…e....-No le salían las palabras así que volvió a coger aire, dos veces mas, inspiro de nuevo y se relajo.- enamorado de...¿de mi mejor amiga?
Él le toco la cara y quiso besarla, ella aparto rápidamente y le miro con cara de sorprendida, no comprendía que hacía, ya que hace segundos le había dejado.
Él: Por favor, no me mates.-Dijo riéndose entre dientes- Esto... era una broma, quería ver cuánto me querías.
Ella le miro, con cara de pregunta, y se fue enfureciendo, pero eso no le duró mas de tres segundos y se echo corriendo a los brazos de él y apretó con todas sus fuerzas hasta dejarlos sin respiración apenas.
Ella: (susurrándole al oído) Te amo.
Él: Sabes que yo a ti te quiero mucho más